El aumento de sal en el agua de OSE ha generado muchas dudas sobre posibles efectos negativos en la salud de los humanos y los animales, pero hay opiniones encontradas, así que, como dice el dicho, “no aclares que oscurece”.
Las enfermedades más frecuentes de los animales (cosa que veo a diario) están vinculadas con problemas renales, especialmente en gatos –enfermedades cardiovasculares y alergias–.
Por lo tanto, un aumento en el consumo de sal (así como sucede en los humanos) puede generar importantes problemas de salud. Si a eso le sumamos el aumento de consumo de otros minerales y hasta cianobacterias, la situación se agrava.
¿Qué podemos hacer?
• Lo recomendable: que los animales no tomen agua de la canilla, sino agua embotellada sin gas. Pero sabemos que no todos los “bolsillos” pueden comprarla.
• El tema “filtros” mejora algunos aspectos del agua, pero aparentemente no disminuyen la sal. Igualmente, si lo tenés, úsalo y hervirla.
• Una alternativa sería mezclar agua de la canilla con agua envasada. De esta forma, bajaría la cantidad de sal.
• Para no malgastar agua embotellada, sobre todo en los perros más babosos: los “mofletudos” bóxer, bulldogs, etc., recomendamos poner menos agua de lo habitual en el bebedero, pero reponerlo más seguido.
• Otra opción sería agua de pozo o de lluvia.
• Hay animales que disfrutan de tomar agua desde la canilla. Esta práctica se puede sustituir por agua de bidón con canillita.
• Fortalecer el consumo de vegetales o frutas: también aportan líquido.
En conclusión: un aumento en el consumo de sal puede ser perjudicial, especialmente en animales más viejos o con las patologías mencionadas. Por eso, en lugar de angustiarnos, recomendamos tomar las precauciones necesarias y estar atentos: no olvidemos que perros y gatos en la calle toman cualquier agua y, en casa, muchas veces lo hacen hasta del inodoro.
Si esta información te sirvió, compartila con tus contactos.
Juan Grosso - Enfermero Veterinario - Terapeuta Holístico Animal
Las enfermedades más frecuentes de los animales (cosa que veo a diario) están vinculadas con problemas renales, especialmente en gatos –enfermedades cardiovasculares y alergias–.
Por lo tanto, un aumento en el consumo de sal (así como sucede en los humanos) puede generar importantes problemas de salud. Si a eso le sumamos el aumento de consumo de otros minerales y hasta cianobacterias, la situación se agrava.
¿Qué podemos hacer?
• Lo recomendable: que los animales no tomen agua de la canilla, sino agua embotellada sin gas. Pero sabemos que no todos los “bolsillos” pueden comprarla.
• El tema “filtros” mejora algunos aspectos del agua, pero aparentemente no disminuyen la sal. Igualmente, si lo tenés, úsalo y hervirla.
• Una alternativa sería mezclar agua de la canilla con agua envasada. De esta forma, bajaría la cantidad de sal.
• Para no malgastar agua embotellada, sobre todo en los perros más babosos: los “mofletudos” bóxer, bulldogs, etc., recomendamos poner menos agua de lo habitual en el bebedero, pero reponerlo más seguido.
• Otra opción sería agua de pozo o de lluvia.
• Hay animales que disfrutan de tomar agua desde la canilla. Esta práctica se puede sustituir por agua de bidón con canillita.
• Fortalecer el consumo de vegetales o frutas: también aportan líquido.
En conclusión: un aumento en el consumo de sal puede ser perjudicial, especialmente en animales más viejos o con las patologías mencionadas. Por eso, en lugar de angustiarnos, recomendamos tomar las precauciones necesarias y estar atentos: no olvidemos que perros y gatos en la calle toman cualquier agua y, en casa, muchas veces lo hacen hasta del inodoro.
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Juan Grosso - Enfermero Veterinario - Terapeuta Holístico Animal
Mi nombre es Sofía Ciliano, soy educadora canina y en esta oportunidad quiero contarles sobre la importancia de la socialización temprana en los perros.
Entendemos como socialización temprana a la etapa de cachorros comprendida entre los 3 y 6 meses, no quiere decir que después de esa etapa no se pueda, pero cuantos antes comencemos mejor.
Sabemos que a esa edad aún pueden estar en plan de vacunación por lo que se recomienda que tengan encuentros seguros con perros conocidos, vacunados y sin enfermedades aparentes.
En el caso de perritos adoptados es importante tener en cuenta que muchas veces ellos si pueden estar acostumbrados a estar con otros perros, entonces debemos socializarlos o naturalizar otras situaciones, por ejemplo: visitas en la casa, paseos a upa con correa en la calle, para que se acostumbren a los sonidos. Estímulos como otros ruidos dentro de la casa, o en apartamento, como ascensores y algunos electrodomésticos. Simplemente el uso o la exposición a esos estímulos, acompañado de una actividad de lamido o con premios apetitosos, ya hace que lo relacione de forma positiva.
La frecuencia de exposición tanto con perritos u otros estímulos debería ser una vez a la semana durante esa etapa de cachorro, para que lo recuerde. Cuando finaliza el plan de vacunas ya va a estar adaptado y esa frecuencia cambiará, ya que sus rutinas también van a cambiar.
Entendemos como socialización temprana a la etapa de cachorros comprendida entre los 3 y 6 meses, no quiere decir que después de esa etapa no se pueda, pero cuantos antes comencemos mejor.
Sabemos que a esa edad aún pueden estar en plan de vacunación por lo que se recomienda que tengan encuentros seguros con perros conocidos, vacunados y sin enfermedades aparentes.
En el caso de perritos adoptados es importante tener en cuenta que muchas veces ellos si pueden estar acostumbrados a estar con otros perros, entonces debemos socializarlos o naturalizar otras situaciones, por ejemplo: visitas en la casa, paseos a upa con correa en la calle, para que se acostumbren a los sonidos. Estímulos como otros ruidos dentro de la casa, o en apartamento, como ascensores y algunos electrodomésticos. Simplemente el uso o la exposición a esos estímulos, acompañado de una actividad de lamido o con premios apetitosos, ya hace que lo relacione de forma positiva.
La frecuencia de exposición tanto con perritos u otros estímulos debería ser una vez a la semana durante esa etapa de cachorro, para que lo recuerde. Cuando finaliza el plan de vacunas ya va a estar adaptado y esa frecuencia cambiará, ya que sus rutinas también van a cambiar.
¿Qué susceptibilidad presentan los gatos a la infección? Son más propensos que los perros a desarrollar una infección. En general los animales más jóvenes son más susceptibles.
¿Cómo se transmite el virus de la rabia? Se transmite a través de la saliva, mediante la mordedura de un animal infectado.
¿Qué gatos son sospechosos de tener rabia? Se debe sospechar de rabia cuando un gato haya sigo mordido o pueda haber estado en contacto con murciélagos.
¿Qué signos clínicos se observan? Nerviosismo, ansiedad, fiebre, anorexia, alteraciones del comportamiento, vómitos, diarrea, lamido constante, vocalización, temblores musculares, debilidad, incoordinación, parálisis, convulsiones.
¿Cómo se diagnostica? Demostración de antígeno directamente de tejido cerebral.
Recordar que hablamos de una zoonosis, por lo tanto la importancia de vacunar a tu gatito.
Doctora Veterinaria Florencia Fonseca - @ShoppingVet
¿Cómo se transmite el virus de la rabia? Se transmite a través de la saliva, mediante la mordedura de un animal infectado.
¿Qué gatos son sospechosos de tener rabia? Se debe sospechar de rabia cuando un gato haya sigo mordido o pueda haber estado en contacto con murciélagos.
¿Qué signos clínicos se observan? Nerviosismo, ansiedad, fiebre, anorexia, alteraciones del comportamiento, vómitos, diarrea, lamido constante, vocalización, temblores musculares, debilidad, incoordinación, parálisis, convulsiones.
¿Cómo se diagnostica? Demostración de antígeno directamente de tejido cerebral.
Recordar que hablamos de una zoonosis, por lo tanto la importancia de vacunar a tu gatito.
Doctora Veterinaria Florencia Fonseca - @ShoppingVet